En el panorama actual de seguridad cibernética, es más importante que nunca para tu empresa prepararse con un plan director de seguridad y saber cómo responder a los incidentes de la informática.
Más de la mitad de las grandes entidades han experimentado en alguna ocasión ataques de piratas informáticos. Ser víctima de violación de datos, ataque de ransomware (software malicioso capaz de hacernos perder el control de la información del PC) u otro incidente de este tipo (relacionado con la protección de datos de empresas, por ejemplo) puede ser muy costoso para tu negocio, tanto en términos de pérdida financiera y de datos como en el daño a la reputación hacia tus clientes, proveedores y otras partes interesadas.
Es fundamental contar con una consultoría de protección de datos y un sólido plan de seguridad cibernética para actuar de acuerdo con la Ley Orgánica de Protección de Datos, LOPD, y el Reglamento General de Protección de Datos, RGPD. Además, debes saber cómo protegerte de los ataques y recuperarte rápidamente de incidentes que puedan ocurrir.
Plan director de seguridad: clave para la protección de datos de empresas
Se trata de un documento que recoge un conjunto de acciones para proteger a una entidad de posibles ataques a la seguridad informática. Gracias a él, se establecen protocolos de actuación, medidas de prevención, responsables en distintos niveles para garantizar la seguridad y todo tipo de situaciones que se deriven de la protección de los datos de una empresa frente a potenciales ataques.
El plan debe ser conocido por los trabajadores que tengan contacto con los equipos informáticos, a los que se debe facilitar toda la información y la formación necesaria, de forma que todos sean agentes activos que contribuyan a conseguir el objetivo de mantener la seguridad informática de la entidad.
Cada trabajador tiene parte de responsabilidad a la hora de proceder, en su puesto de trabajo, según los correctos protocolos y procedimientos que eviten cualquier riesgo en la seguridad de los sistemas y dispositivos. Por eso, el plan de seguridad debe estar en conocimiento de toda la plantilla, para que pueda ser aplicado en el momento y en la medida que resulte necesario.
Contenido del plan
No hay un modelo estándar a seguir en su elaboración. Cada empresa puede decidir la extensión y el contenido específico en consonancia con su número de trabajadores, la tecnología que use y el nivel de conectividad.
No obstante, un documento de este tipo debería recoger los principales aspectos legales, técnicos y organizativos necesarios para que las personas que hagan uso de él puedan valerse de unas bases sólidas a la hora de tomar decisiones.
Entre las partes principales que debe incluir el documento están las siguientes:
– Normativa de referencia. En este bloque, se debe hacer alusión a la importancia de la protección de datos de carácter personal y datos clave para la seguridad y estabilidad de la empresa. Se deberán incluir referencias a la LOPD, al RGPD o a la Ley de Servicios de la Sociedad de la Información y del Comercio Electrónico (LSSI), entre otras.
– Diagnóstico. Un equipo de expertos debe analizar la situación de seguridad en que se encuentra tu entidad, indicando posibles amenazas y riesgos.
– Objetivos. Debes informar de la finalidad que aplicar el plan.
– Protocolos de actuación. Contempla los escenarios que pueden poner en riesgo la seguridad informática y prevé las formas de actuación. El plan también expone la relación de la empresa con la consultoría de protección de datos y en qué momentos se debe consultar o informar de incidentes.
– Medidas de control. Debes estipular las formas para controlar que las acciones que se están llevando a cabo son las correctas y funcionan. En este apartado, también puedes ayudarte de la experiencia y conocimientos técnicos de una consultoría.
– Responsables. Resulta clave definir las personas que tienen algún grado de responsabilidad en la correcta aplicación del plan, sus cometidos y las posibles medidas preventivas y correctivas.
– Inventario. Algunos planes incluyen un inventario de los dispositivos y sistemas disponibles, además de detalles sobre las formas de uso y medidas de seguridad básicas.
– Recursos económicos. En algunos casos, este documento marca partidas económicas que se destinan a garantizar la ciberseguridad.
Proceso continuo
Un plan de este tipo es un documento vivo, que va mejorando y cambiando a medida que crecen o cambian los recursos económicos, humanos y tecnológicos de tu organización. Su aplicación es continua y cuando se producen cambios importantes en la entidad debe ser objeto de las correspondientes revisiones y los cambios necesarios.
En la medida en que tu empresa existe y está expuesta a algún riesgo de seguridad informática, debes disponer de un plan con vigencia y que sea conocido y aplicado por todos los miembros que pueden influir, de alguna manera, en la seguridad de los sistemas informáticos.
Pasos para abordar las amenazas que vulneran la LOPD
Hay cinco pasos que como empresa debes tomar para abortar estas amenazas:
– Identifica: haz un inventario de tus activos más valiosos, como datos de empleados, clientes y pagos.
– Protege: evalúa qué medidas de protección debes tener para estar lo más defendido posible contra un incidente de este tipo.
– Detecta: ten sistemas implementados que te alerten si ocurre un incidente, incluida la capacidad de los empleados de informar sobre problemas.
– Responde: haz y practica un plan director de seguridad que dé respuesta a las incidencias para contener un ataque y mantener las operaciones comerciales en el corto plazo.
– Recupera: conoce lo que debes hacer para volver a las operaciones comerciales normales después de un incidente o incumplimiento, incluida la evaluación de cualquier obligación legal.
Conclusión: sentido común y no correr riesgos
Aquí hay algunos consejos que tu empresa puede seguir para mejorar su seguridad en línea:
– Mantén los equipos limpios, usa lo más moderno en software de seguridad, navegador web y sistema operativo en tu negocio para defenderte contra virus, malware y otras amenazas en línea.
– Protege la información y las cuentas mediante la incorporación de una autenticación sólida siempre que sea posible y haciendo que cada contraseña sea larga y exclusiva.
– Educa a los empleados: los errores humanos a menudo son la causa de las infracciones cibernéticas. Enséñales las mejores prácticas básicas.
Recoge todos estos puntos en tu plan director de seguridad y así aplicarás las mejores prácticas de protección de datos de empresas.