La seguridad en los servidores de Internet, tanto a nivel personal como empresarial, es un elemento clave en la vida de todas las personas. Actualmente, toda nuestra información (incluso aquella de cuya existencia digital no somos conscientes) se encuentra dentro de la Red.
Por este motivo, para salvaguardar los contenidos de la empresa y si nos dedicamos al mundo de las construcción de aplicaciones y tecnologías móviles, es esencial que tomemos las medidas necesarias en la protección de datos, guiadas por los expertos en el sector, para conseguir que los usuarios se sientan seguros.
Primero, debes estar familiarizado con las normativas RGPD (Reglamento General de Protección de Datos) y LOPD (Ley de Protección de Datos de Carácter Personal).
RGPD y LOPD
Reglamento General de Protección de Datos
Aunque el RGPD lleve en vigor desde 2016, no será aplicable hasta el 25 de mayo de 2018 y todas las empresas españolas estarán obligadas a cumplir con él y proteger los datos públicos y privados existentes.
Es decir, este Reglamento debe ejecutarse en el tratamiento de los datos personales de cualquier actividad empresarial y aplicar medidas técnicas demostrables en todo momento, siendo conscientes de lo que estamos haciendo y conociendo los riesgos del incumplimiento de esta normativa.
Las obligaciones del empresario con respecto a esta normativa para garantizar la protección de los datos sensibles, la adopción de decisiones de forma automatizada y las transferencias de información serán las que, a continuación, te vamos a exponer.
Debes realizar procedimientos sencillos, para que los interesados en compartir sus datos y que estos sean protegidos entiendan a la perfección cuáles son sus derechos a la hora de utilizar Internet. El encargado de dicha gestión tiene que mantener informado al cliente, en todo momento, de las posibles actuaciones derivadas de su petición con un mes de antelación (el cual podrá extenderse, si nos encontramos frente a una situación de difícil comprensión).
El posible responsable también tiene el derecho de verse en la negativa de rechazar la solicitud, si así lo considera, teniendo el mismo plazo de respuesta anteriormente mencionado.
Para que una empresa se asegure al 100 % de que está cumpliendo con su deber con el RGPD, deberá tener en cuenta los siguientes pasos, con el fin de evitar los problemas judiciales y las sanciones:
– Deberá realizar un análisis de protección de datos legales supervisado por auditores expertos en la informática.
– Informar sobre el estado de los datos, en todo momento, así como sobre la finalidad para la que van a ser utilizados y las diferentes situaciones en las que el afectado puede verse en su derecho de reclamar volver a disponer de sus datos.
– Contratos escritos entre responsables y encargados del tratamiento.
– Análisis de riesgos frecuentes.
Como también te hemos mencionado anteriormente, las auditorias deben tener en cuenta el LOPD, otra normativa que irá de la mano del RGPD.
Protección de datos de carácter personal
Siguiendo las indicaciones expuestas en la Constitución Española, el derecho al honor y a la intimidad personal y familiar no puede verse afectado por el uso de la informática y las tecnologías.
Por ello, has de tener claro que la protección de los datos personales es un derecho fundamental que obliga a las personas a tener el control absoluto sobre todas las derivaciones y todos los usos que se realizan con su información personal, con el fin de proteger la intimidad propia y diferentes derechos relacionados con la libertad pública.
Por lo tanto, la ley obligará a las empresas que traten los datos personales de sus usuarios a darlos de alta en la Agencia Española de Protección de Datos; mantener actualizado de forma regular el Documento de Seguridad; y tener, en todo momento, el consentimiento de las personas afectadas.
Con estas medidas, los empleados de una empresa o sus clientes pueden sentirse seguros y protegidos y saber que sus datos personales nunca serán difundidos. En el caso de que esto sucediese, las sanciones para los responsables podrían ascender hasta 600.000 euros.
La normativa legal por la que se construye la LOPD está formada por las leyes impuestas en la Constitución Española (artículos 10 y 18); la Directiva 95/46/CE; la Ley Orgánica 15/1999, de 13 de diciembre; la RD 1720/2007; y el Reglamento (UE) 2016/679. Lo que demuestra que, aunque no sea tan reciente como el RGPD, se ha ido actualizando correctamente para adaptarse a la informática.
Precauciones a tener en cuenta con los servidores
Una vez, personalmente, te comprometes a cumplir con estos Reglamentos legales, debes encontrar métodos externos que te ayuden a proteger los servidores de tu empresa frente al malware o a cualquier intento de hackeo de los datos que gestionas. En pocas palabras: refuerza la seguridad.
¿Cómo puede reforzarse la seguridad al máximo?
Para empezar, te recomendamos que todos los datos estén protegidos con contraseñas y pocas personas sepan cuáles son y puedan acceder a ellos. Además, el control acerca de cuándo acceden a estos datos debe ser exhaustivo.
Además, el acceso al servidor debe ser manejado por especialistas. Encuentra una forma de que no puedan accederse a él los usuarios con conocimientos informáticos estandarizados, aunque profesionales.
Utiliza un único ordenador para depositar estos datos, el cual no solo debe presentar todos los cortafuegos y antivirus posibles, sino que cuente con la información depositada en él escondida en diferentes carpetas y ubicaciones independiente y que no puedan relacionarse unas con otras.
Realiza la migración de datos de forma frecuente y controlada por expertos en el sector, lo que permite que los datos no se encuentren ubicados siempre en el mismo servidor o sistema.
Sin embargo, no solo necesitas protección contra los diferentes ataques cibernéticos, sino también con los factores físicos. La sala donde se encuentre el ordenador debe estar acondicionada contra incendios y vigilada ante posibles robos.
Ser precavidos para asegurar el éxito
Con estas claves y conociendo las especificaciones de estas leyes, podrás mantener los servidores sin complicaciones y consiguiendo que los clientes y trabajadores se encuentren cómodos y sepan que sus datos están siendo protegidos de forma constante y la mejor manera posible.